El espionaje es un arte que requiere ingenio, estrategia y herramientas adecuadas. Pero si habláramos de utilizar aerogeneradores para obtener información, parecería ciencia ficción. Sin embargo, la realidad supera la ficción, China ha sido acusada de espiar a Alemania.
En corto. Un grupo de expertos alemán ha detallado en un informe que los fabricantes chinos podrían estar utilizando sensores en los aerogeneradores para recopilar datos no autorizados en Alemania.
En detalle. El informe, encargado por el Ministerio de Defensa alemán, sugiere que las empresas chinas podrían usar los sensores de las turbinas para extraer datos confidenciales o apagar las turbinas de forma remota. Además, han recomendado suspender los proyectos eólicos que tengan firma china, siendo el primero el parque eólico marino Waterkant.
¿Y qué dice China? La Cámara de Comercio de China ante la UE (CCCEU) ha calificado el informe como "técnicamente inverosímil y carente de base fáctica". Desde la agencia china han asegurado que las compañías están cumpliendo con las regulaciones europeas. Además, han argumentado que las preocupaciones sobre la seguridad, relacionadas con la recopilación de datos o el control remoto, son un pretexto para bloquear a las empresas chinas del mercado europeo, lo que podría afectar la competencia leal y las relaciones comerciales internacionales.
Pero, ¿las turbinas se pueden usar para espiar? Según la CCCEU y los expertos chinos, las turbinas eólicas no están equipadas para espiar. Los sensores están diseñados para optimizar el rendimiento, monitorear fallos y proteger la vida silvestre. Además, los sistemas de control y gestión remota de los parques eólicos, como el Waterkant, son gestionados por empresas alemanas y europeas. Desde la parte china refuerzan la idea de que estas alegaciones son infundadas y parte de un intento de proteger el mercado local.
Pero sí en defensa. Los proyectos eólicos marinos se han llegado a suspender por preocupaciones de seguridad militar como ocurrió en Suecia. El motivo se debe a que un parque eólico puede afectar en la detención y seguimiento de misiles debido a las dimensiones de un aerogenerador. No obstante, otros países están usándolos a su favor como el caso de Polonia, que ha instalado sistemas de radar y sonar entre los aerogeneradores. Además, una estrategia similar está abordando WindEurope junto con la OTAN y la Agencia Europea de Defensa (EDA) con la creación de un nuevo proyecto: Symbiosis. En él buscan desplegar energías renovables marinas en el espacio de defensa marítima y crearán sinergias para abordarlos.
Otras acusaciones de espionaje a China. No es la primera vez que se le acusa al gigante asiático en el país germano, hace menos de un año, tres sospechosos fueron detenidos por robar tecnología militar. También se le acusó de sobrevolar Europa con su avión espacial secreto. Cabe añadir, todo el material que esta diseñando para mejorar sus habilidades en el espionaje como utilizar las señales de Starlink para detectar aviones espía y drones, o una cámara que identifica caras a 100 kilómetros. Por último, el país asiático está desarrollando una agencia de espionaje, el Guoanbu, para convertirse en la primera potencia mundial para 2049. El enfoque se basa en inteligencia económica y tecnológica, junto con capacidades de ciberespionaje.
Previsiones. Ahora mismo el repliegue arancelario de Estados Unidos ha dejado un vacío en el comercio global, que China está aprovechando para expandir sus exportaciones. Por ese motivo, China quiere seguir invirtiendo y trabajando con la Unión Europea. A pesar de esta fricción, los comercios bilaterales han alcanzado los 5,591 billones de yuanes (771 mil millones de dólares) en 2024, lo que refleja un aumento interanual del 1,6 por ciento.
Imagen | Pixabay
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