El SUV se lo había comido todo pero las familias tienen una alternativa mejor: las furgonetas diésel. Estos son los motivos
En los últimos años hemos visto que el precio de los automóviles se ha encarecido mucho. Detrás de este crecimiento en los precios hay motivos racionales (más tecnología en materia de seguridad y reducción de las emisiones contaminantes) pero también los hay irracionales.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de irracionales? A los gustos del público, que está demandando vehículos SUV a pesar de ser menos seguros, más gastones y, también, más caros que sus hermanos de carrocerías tradicionales. Porque aunque el vehículo ha perdido parte de su vertiente más pasional, hay algo que no cambia: un coche tiene que entrar por los ojos.
¿Seguro? Podemos decir que esto es lo más habitual pero en el mercado también hay compradores que optan por lo más simple, sencillo, barato y, en definitiva, racional posible. Personas que no se dejan llevar por las modas y buscan un coche que les encaje como un guante. Personas a las que les da lo mismo ver cada día un coche de esta, aquella o cualquier otra forma si saben que, en el fondo, están ahorrando y viajando lo más cómodo posible.
Para esas personas, hay una buena noticia: vuelven las furgonetas diésel.
Aviso, este artículo es especialmente interesante si tienes familia o quieres utilizar tu furgoneta como casa de vacaciones.
Vuelve la opción más racional
En los últimos años hemos ido viendo cómo el mercado de las furgonetas se ha ido pasando a lo eléctrico. El movimiento que más miradas atrajo fue el de Stellantis, que anunció que estos vehículos sólo se venderían en formato eléctrico.
De golpe y porrazo, la Citroën Berlingo, Peugeot Rifter u Opel Vivaro, entre muchas otras, dejaban de contar con opciones de combustión. Cualquiera de ellas y de sus hermanas se venderían con motores puramente eléctricos. Las últimas unidades disponibles eran las ya fabricadas. Desde enero del año pasado, el cliente que buscara un vehículo nuevo tendría que saltar al solo eléctrico.
Toyota, cuya Proace también está fabricada por Stellantis pero terminan de pulirla con la imagen y algunos elementos nipones, recibió el daño colateral de esta situación. Sin embargo, desde hace unas semanas sabemos que esta furgoneta volverá a ofrecer versiones diésel.
Al mismo tiempo, la renovación de la Citroën Berlingo también traerá un motor de gasolina electrificado debajo del brazo. No es la mejor noticia para quien sólo piensa en diésel pero sí será una buena alternativa para quienes estaban interesados en una Berlingo, Rifter o Vivaro, porque todos estos modelos incorporarán esta posibilidad a su gama de motorizaciones.
La furgoneta diésel sigue siendo perfecta para las familias que buscan viajar lo más cómodo y barato posible
Con este cambio de opinión de Stellantis, el conglomerado, que también está experimentando con el hidrógeno en este tipo de vehículos, ha decidido dar marcha atrás. Y, además de los transportistas, hay otro grupo que se beneficiará: las familias.
Quienes busquen el coche más cómodo y espacioso posible para una familia, la furgoneta es la mejor opción. Si este vehículo, además, se va a utilizar para hacer grandes kilometradas por carretera, el diésel sigue siendo la opción más válida. El motor de gasolina electrificado es una alternativa menos atractiva pero mejor que la opción única del eléctrico. Los conductores que busquen un vehículo para camperizar al menor precio, también tienen en la furgoneta una excelente opción.
El mercado ha abandonado a los monovolúmenes y el SUV se ha comido su terreno. Pero estos coches no son tan amplios ni polivalentes como lo eran los primeros. Para quienes esto último es una prioridad, la furgoneta se había convertido en un refugio.
Aunque estéticamente no sean los vehículos más atractivos del mercado, la furgoneta es, generalmente, más barata que un SUV del mismo tamaño y potencia. Su interior está pensado para priorizar el confort durante la marcha y los accesos son perfectos con sus puertas correderas, como hacían los buenos monovolúmenes.
En el interior, tampoco se hacen concesiones al diseño. En una furgoneta todo es funcionalidad. Hay huecos para dejar objetos por todas partes, lo que es un punto positivo para familias que viajan con niños y quieren tenerlo todo a mano pero también para quien necesita exprimir hasta la última gota del interior en sus vacaciones.
Y entre las ventajas del interior de una furgoneta, matrícula de honor para las plazas traseras. En muchas de ellas hay más de tres asientos pero, además, las de la tercera fila suelen permitir el transporte de adultos, pues no tienen que lidiar con una acusada caída del techo. Matrícula de honor para las tres plazas traseras reales de serie. Sí, reales y no el clásico 2+1 donde el pasajero del centro es un niño o un adulto muy delgado que acaba destrozado al final de un viaje largo. ¡Y con Isofix para los niños!
Por último, y ya sacando la calculadora, el mantenimiento y las reparaciones de la furgoneta son, generalmente, más baratos por contar con consumibles menos elaborados, más sencillos y pensados para un ámbito profesional. Si a eso le sumamos un robusto motor diésel para rodar por carretera, que no tiene los inconvenientes de las recargas del eléctrico, el círculo se cierra.
Por suerte, estamos en un momento que tenemos opciones para todos los públicos y tipo de conductores. Así que yo digo: ¡larga vida a las furgonetas diésel!
En Xataka | He conducido con una furgoneta eléctrica por un circuito. Esto he aprendido para ahorrar al máximo
Foto | Toyota
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alpy
Está claro que si tienes que lidiar con una familia, estilo niños pequeños o padres mayores, necesitas un coche con asientos altos y mucho espacio. En cuanto desaparecen los monovolúmenes, esas personas se van a por las furgonetas.
marta_mmm
Posiblemente uno de los artículos publicados más a destiempo de la historia de nuestra civilización...
moruiz
En mi opinión, el artículo llega tarde 5 años al menos.
crisct
He tenido 5 coches en mi vida, el último un scenic 7 plazas 2010, 1.5Dci, family edition (si amigos, el nombre de la variante ya lo dice todo)
El coche más práctico que he tenido jamás, consumo de 5.5l (del ordenador de abordo), 1000km con 100 euros de diésel. Tele detrás para las niñas de serie.
Si mañana se rompe, me compro otro igual o similar. La familia es lo primero.
P. D. Las furgonetas de segunda mano son notablemente más caras que un familiar o un monovolumen compacto como mi scenic. Eso es un hándicap para los que no llegan a 20k€ hoy en día y han de tirar de segunda mano.
Usuario desactivado
Hay muchos tipos de SUV. Es cierto que lo de "ser menos seguros, más gastones y, también, más caros" es cierto para lo que inicialmente se le denominó tal cual, pero los SUV compactos son tan seguros como cualquier otro auto, con un precio adecuado (MSRP), y similarmente gastan lo que cualquier sedán grande.
Nost
Nosotros hace años, antes de tener familia, pensamos que la mejor opción era la dacia dokker y eso hicimos.
Tenías espacio de sobra para meter el carro sin plegar directamente y muchas más cosas. De altura respecto al suelo igual o más que los suvs.
Con todos los extras disponibles se quedaba muy bien de precio en comparación con cualquier otro modelo equivalente del mercado.
Está claro que no tiene los acabados ni muchos extras modernos que hay ahora pero con lo necesario por la relación calidad precio que tenía.
buruburu
Buen recordatorio de que no siempre se llega antes corriendo más.
Los coches eléctricos están bien cada vez para más necesidades. Pero sigue habiendo amplios campos que no cubren, y en los que son mejores otras opciones, como los diésel.
Me alegra la decisión de Stellantis y Toyota de recuperar sus furgonetas diésel.
Pero la opción SUV (Ateca, Tucson, Sportage) sigue siendo válida, consume menos y tiene un precio similar.
Y respecto a las contaminación, un diésel actual conlleva una gran mejora frente a uno antiguo, por lo que más valdría facilitar esa renovación que dificultarla.
the_lord
Nosotros tenemos un CX-5 y hace un par de semanas alquilamos una Rifter estando de vacaciones puesto que tenemos 2 hijas de un año. La furgoneta es práctica en cuanto a espacio, las puertas correderas una marvilla y el maletero bajo se agradece especialmente si llevas un trasto de carro como nosotros. Eso sí, la conducción se me hizo un poco aparatosa como furgoneta que es. Al coger nuestro coche del aeropuerto pude comprobar (otra vez) lo cómodo que es en marcha y la sensación de turismo que tiene al conducirse.
kebonem
Hola Alberto,
gracias por el artículo, hace unos meses tuve una oferta de Toyota por la Proace City Verso, la que fabrica Stellantis por unos 23k€ y la verdad que era un producto válido y funcional para nuestra familia, de momento de cuatro pero sin descartar un tercer peque.
La siguiente vez que miré, ya sólo había opción e-XXX a un mínimo de 38k€.
De joven siempre me han encantado los coches, los extras, los techos panorámicos, equipos hi-fi, navegadores y pantallas, pero creo que una vez tienes familia, te entra más esa "racionalidad" :D
Mi problema y por qué no me termino de decidir, es porque el 95% del tiempo nuestro coche lo usa sólo mi pareja para ir a trabajar, y realiza unos 150kms por carretera entre tres y cinco veces por semana, por lo que siempre pienso que esta carrocería y al ser más grande la furgo, gastará más combustible por su propia forma, aunque opino lo mismo de un SUV.
No es fácil hoy en día decidirte por un coche o un modelo, tengo en el radar el C5 AirCross, el 5008, y el Touran, pero la furgoneta es una opción bastante interesante.
Saludos!
JuanAR
Son geniales para cuando de aquí a poco no te dejen entrar en las ciudades con ellas.
Que ojo, eran muy buena opción y lo es para los que vivan en pueblos, pero para mucha gente ya no. Yo soy de una ciudad pequeña y ya están planteando las zonas de bajas emisiones.
pos_soy_yo
Al fin y al cabo, un SUV es una furgoneta.
mszerox
Al final los Toyota quedan atras comparado a los autos rusos, que son mucho mas baratos.