Imagina que semanas (o meses) después de pedir un estupendo Tesla Model 3 (o peor aún, tu Model Y) llegas al concesionario y te entregan tu flamante coche con sorpresa: algunos de los puertos USB-C no funcionan.
Eso es lo que les está ocurriendo a algunos nuevos propietarios de estos coches, que han notado cómo esos puertos de carga en la consola central o en los asientos traseros no funcionan . Tesla ha reconocido que eso está pasando, y que el problema es una vez más el de la escasez de chips.
Una situación rocambolesca y sin solución a corto plazo
Varios han sido los usuarios que han contado eso mismo en foros como Reddit, donde muestran imágenes del interior de sus coches. En esas imágenes aparecen los agujeros de los puertos USB-C de la consola central, pero sin que haya puertos USB-C integrados en esos agujeros.
Los problemas también parecen afectar en algunos casos a los puertos de los asientos traseros. En muchos casos la carga inalámbrica integrada en estos vehículos tampoco funciona.
Varios de los nuevos propietarios se quejan además de que Tesla ni siquiera avisó de que sus coches no contarían con esos puertos USB-C, y solo se enteraron cuando vieron que efectivamente estaba pasándoles a otros nuevos usuarios de los Model 3 y Model Y de Tesla.
En Electrek lograron ponerse en contacto con Tesla, y portavoces de la firma indicaron que la razón de esta desagradable situación es la escasez de chips. Esperan que los puertos USB-C vuelvan a estar disponibles en diciembre y que los clientes afectados podrán pedir cita para que les sean instalados.
La industria automovilística ha sido sin duda una de las grandes afectadas por esos problemas de escasez de chips, y otros fabricantes han tenido que pasar por situaciones inverosímiles hace tan solo unos meses. Tesla y BMW ya tuvieron que quitar por ejemplo el soporte lumbar de algunos de sus modelos porque según ellos "nadie lo usaba", aunque los problemas de inventario volvieran a ser culpables.
Así, también pasó en BMW recientemnete que sus responsables indicaron que sus nuevos modelos dejarán de tener pantalla táctil. Fabricantes como el norteamericano RAM —del grupo Stellantis ha dejado de incluir el espejo retrovisor digital de serie en sus camionetas RAM 1500.
Hay más casos de otros fabricantes que han tenido que enfrentarse a una curiosa situación: la de volver un poco al pasado y hacer que estos coches, cada vez más tecnológicos, vuelvan a ser algo más analógicos.
Vía | Electrek
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