Si te has abonado a Disney+, tendrás más que examinado el catálogo de Marvel, Pixar y Star Wars. Hay pequeñas sorpresas en esos apartados, como los extras de las películas, la animación con superhéroes Marvel, o los cortos clásicos de Mickey y compañía. Y también hay grandes ausencias, como las series de animación Marvel de los noventa, que Disney+ ya ha confirmado en su cuenta de Twitter que llegarán en un futuro cercano.
Pero hay mucho más en el catálogo de Disney+. Por desgracia, el amplísimo fondo de Fox, salvo las películas de X-Men, no están por ninguna parte, pero hay que tener en cuenta que Disney es una empresa activa desde antes de la llegada del color, cuando solo se dedicaban a la animación. Hay material de sobra para engordar el catálogo de Disney+, y no todo está a la vista. Nos hemos adentrado en los abismos de la plataforma para entresacar algunas pocas películas que se salen de lo habitual y más publicitado: hemos dejado aparte Marvel, Star Wars y animación, y esto es lo que nos hemos encontrado. Lo más raro (pero jugoso) de Disney+.
'Un gato del F.B.I. ' (1965)
Deliciosamente pasadas de moda, pero tan efectivas y adorables como el primer día, las comedias Disney de los sesenta y setenta dirigidas por Robert Stevenson y compañía siguen siendo entretenimiento familiar de primera categoría. Esta es la primera protagonizada por Dean Jones (y la despedida de la casa de Hayley Mills, que hizo de gemelas en 'Tú a Boston y yo a California'), en una comedia de enredo con un gato como único testigo de un crimen y que debe ser vigilado por agentes del FBI. Es la primera de una larga tradición de premisas de una sola línea, maravillosamente estiradas hasta el ridículo.
'Mi cerebro es electrónico' (1969)
El carisma innato de Kurt Russell queda más que demostrado en su primera película de éxito con Disney, con un argumento de protociencia-ficción francamente divertido, en el que un rayo lo convierte en una calculadora humana. El chaval protagonista (siempre Russell) seguiría sufriendo demenciales accidentes, convirtiéndole sucesivamente en invisible (en 'Te veo y no te veo', no disponible en la plataforma) u otorgándole superfuerza ('El hombre más fuerte del mundo', que sí está en el catálogo de Disney+)
'La montaña embrujada' (1975)
Un vuelco en el estilo de la época de Disney, que afrontó aquí una especie de thriller de ciencia-ficción protagonizado, eso sí, por un par de niños extraterrestres, huérfanos y con poderes que desafían la lógica. Dos iconos del cine fantástico como Ray Milland y Donald Pleasance les dan la réplica en una película en una curiosa tierra de nadie, entre familiar y siniestra, pero sin violencia, muertos ni drama. Una curiosidad de culto seguida de una secuela aún más siniestra y también en Disney+, 'Los pequeños extraterrestres', esta vez con Bette Davis y Christopher Lee como villanos tras los niños.
'Un candidato muy peludo' (1976)
A finales de los setenta las comedias tradicionales Disney empezaban a quedarse sin argumentos, pero antes de dar el giro hacia la imaginería infantil violenta y siniestra, les quedaban unos cuantos argumentos demenciales que explotar. Esta tronchante comedia del tremendo combo Stevenson-Jones llegó 17 años después de 'El extraño caso de Wilby', y en ella un abogado se transforma en perrazo mientras intenta hacer campaña en las elecciones de fiscal del distrito. Desvergonzada, con unos disfraces de perro tan obvios como delirantes, y perfecta para una velada de fantasía familiar.
'El abismo negro' (1979)
La 'Star Wars' original, mucho antes de que Disney sospechara ni remotamente de que acabaría siendo dueña de la saga, inspiró multitud de imitaciones. Esta es una de las más dignas, y también una película de ciencia-ficción inusualmente oscura: con efectos especiales revolucionarios para la época y un reparto de estrellas (con gente como Robert Forster y Anthony Perkins), se plantea como una extraña versión de '20.000 leguas de viaje submarino', pero con elementos de ciencia-ficción de los setenta que no podían estar más alejados del canon 'Star Wars', como 'Solaris'. Incluye robots simpáticos, pero que cuando revelan su auténtica función hielan la sangre a más de un niño (y adulto).
'Tron' (1982)
Una película pionera hasta un extremo que hace que hoy, casi cuarenta años después, resulte aún más extrema y experimental que en su día. Con una antropomorfización visionaria de las tripas de un ordenador y de las mecánicas de un videojuego, las escenas de combate con discos y carreras de motos son merecidamente míticas y de visita obligada si te interesa la historia de los efectos especiales. Sus colores fríos e inhumanos y sus fondos vectoriales han inspirado toda una retro-estética. Mucha atención a la inferior pero estimable 'Tron: Legacy', pero sobre todo a la brutal serie de animación 'Tron: La resistencia', ambas también en Disney+
'Oz, un mundo fantástico' (1985)
Figuró en el Guinness de los Records por ser la secuela más distante del original (¡46 años!) hasta que la propia Disney lo superó con 'Bambi 2' (¡¡64!!), pero es famosa sobre todo por proponer una experiencia mucho más oscura y siniestra que el clásico de L. Frank Baum de 1900. Es cierto que aquella tenía algunos tintes pesadillescos, pero es que aquí empiezan mandando a Dorothy a recibir electroshocks para que se olvide de Oz. Y eso que se basa en las dos continuaciones oficiales del libro original, 'La maravillosa tierra de Oz' y 'Ozma de Oz'. Pero aquí, debido a que Dorothy se ha olvidado en parte de Oz (algo que roba de 'La historia interminable', de un año antes), el lugar maravilloso es ahora un sitio peligroso medio en ruinas y poblado por criaturas amenazadoras. Un clásico del cine infantil esquinado y extremo.
'Taron y el caldero mágico' (1985)
De acuerdo, dijimos que nada de animación, pero estaremos de acuerdo en que podemos hacer una excepción con esta, muy muy lejos de ser la típica película de animación de Disney. De 1985 -como 'Oz, un mundo fantástico', año en el que alguien decidió en la productora que el camino más rápido hacia el corazón de los niños era provocarles terribles pesadillas-, pese a su monumental fracaso de taquilla sigue siendo una de las películas más ambiciosas y técnicamente perfectas de la casa, con una animación tradicional absolutamente maravillosa y un uso pionero del CGI. La historia, que parece beber de la dark fantasy tipo 'Conan', se mereció una calificación PG (menores acompañados), inaudita en el estudio.
'Mr. Boogedy' (1986)
Una familia se muda al pueblo de Lucifer Falls sin que, por algún motivo, eso haga sonar ninguna alarma. Por supuesto, la casa en la que se instalan está encantada, y en ella vive un fantasma que, lejos de ser el típico espectro family-friendly de Disney, tiene un horrible rostro quemado, estilo Palpatine. 'Mr. Booged'y es pura producción televisiva (los medios que exhibe son escasísimos) que quería funcionar como piloto para una serie que nunca llegó, pero es sorprendentemente siniestra y enloquecida, lo que la ha convertido en una pieza de culto.
'Fuzzbucket' (1986)
Más producto televisivo entretejido con el material del que se construyen las pesadillas. Esta vez tenemos una especie de gnomo absolutamente demoniaco,al que solo un niño es capaz de ver, en una especie de imitación de 'ET el extraterrestre' que, obviamente, se queda más cerca de 'Mi amigo Mac'. Dirige Mick Garris, futuro productor de 'Masters of Horror' y produce John Landis, director de 'Un hombre lobo americano en Londres', lo que sin duda añade un poso de horror puro a esta extrañísima cinta Disney.
'Rocketeer' (1991)
Basándose en un bellísimo y nostálgico cómic de Dave Stevens, esta historia de retro-superhéroes ambientada en el Hollywood dorado de los años treinta nos presenta a un joven piloto acrobático que desface entuertos con un cohete que le propulsa por los aires. Con un reparto perfecto (al desconocido Billy Campbell se unen el villano de a lo Errol Flynn Timothy Dalton y la belleza estilo pin-up de Jennifer Connelly), la película mereció mejor suerte. Más tarde Joe Johnston recuperaría el tono de aventura clásica con una de las películas menos encorsetadas del MCU, la brillante 'Capitán América: El primer vengador'
'Doug, su 1º película' (1999)
La primera película (y última: es un título curioso teniendo en cuenta que Disney la usaba como broche de la serie de animación) protagonizada por el adolescente Doug tiene más de la estética y el estilo de Nickelodeon -donde la serie vivió sus primeros capítulos antes de ir al Disney Channel- que de Disney, pero eso no le quita ningún mérito. Es una estupenda aventura con monstruos marinos, amores adolescentes, y un respiro dentro del algo uniforme estilo Disney de animación que se respira en la plataforma.
'John Carter' (2012)
Otro brutal fracaso de taquilla completamente inmerecido, y que nos privó de ver más películas adaptando la saga 'Barsoom', clásico de la literatura pulp de Edgar Rice Burroughs. En esta ocasión nuestro héroe viaja al ficticio planeta de Barsoom, o Marte, y protagoniza una epopeya rebosante de imaginación, criaturas épicas y retrotecnología loca. Y romance espacial, subgénero que en su día puso de moda la novela original. Fue la primera película en imagen real de su director, Andrew Stanton, con una carrera rebosante de éxitos como director y guionista en Pixar, pero su fracaso posiblemente vaticina pocas más.
Ver 21 comentarios