"¡Este hombre nunca hará nada!", cuentan que gritó el papa León X al ver que Leonardo da Vinci se entretenía en hacer pruebas con un nuevo barniz en lugar de ponerse manos a la obra con el trabajo que le había encargado. Y, aunque razón no le faltaba (el genio toscano era célebre por ir a su bola), da Vinci es el padre de alguno de los misterios más interesantes del mundo moderno. Y no, no me refiero a lo de Dan Brown.
Entre 1503 y 1507, Leonardo da Vinci trabajó intensivamente en un cuadro icónico, la Mona Lisa. Su sonrisa, su técnica, su extrañeza han sido temas recurrentes en la crítica y la historia del arte. En 2010, un grupo de investigadores franceses encontraron una de las claves que se ocultaban detrás del famoso retrato y precisamente era el barniz.
Utilizando técnicas no invasivas, Viguere y su equipo descubrieron que había partes de la pintura que acumulaban docenas y docenas de finísimas capas de barniz transparente y que era esa técnica la que daba su color característico a la obra de da Vinci. En los últimos días, ha vuelto el debate sobre si el transparente podía ser un color y lo cierto es que es una pregunta interesante.
Un problema nada transparente

Efectivamente, hay argumentos interesantes a favor de esta idea. Hace unos años, el Museo de Arte de Portland invitó al pintor y fabricante de colores Robert Gamblin a impartir una conferencia sobre "por qué las pinturas clásicas se veían tan diferentes a las contemporáneas". Gamblin explicaba que el enfoque clásico es el indirecto. Es decir, el resultado final es una combinación de tres o más capas de pintura.
Entre capas de imprimación, barnices y pinturas opacas, sobresale el uso de los esmaltes transparentes que, aunque suelen olvidarse, unifican el color, controlan la intensidad de la luz y trabajan la sensación tridimensional de la pintura explica Gamblin.
Esto es así porque “la luz viaja dentro de la superficie de la pintura. Luego, el barniz colorea la luz a medida que vuelve al ojo. La aplicación de muchos esmaltes hace que las pinturas se vean más oscuras porque hay mucha luz atrapada dentro de la película de pintura”.

Lo transparente trabaja ahí. En principio, es bien conocido que la luminosidad no es un color sino, más bien, una propiedad de los colores junto con el tono y la saturación. Pero cuando nos encontramos materiales que no tienen ninguna de las otras dos propiedades la pregunta se queda botando en el terreno de juego.
Al menos, al nivel práctico: como respuesta técnica a la evidencia de que la ausencia de color (que no la ausencia de luz - que es el negro) puede tener autonomía perceptiva propia. Yo tiendo a estar de acuerdo con esto, pero en el fondo la pregunta si el transparente es un color va más allá. Es algo interesante porque enfrenta diferentes ideas del color desarrolladas por diferentes disciplinas científicas.
Enfocar la pregunta desde la cromatografía no nos dará la misma respuesta que enfocarla desde la estética experimental o la psicología de la percepción. Obtendremos desde un 'no' rotundo a un 'sí' parcial. Y no es un problema de indefinición, sino al contrario, como diría Delia Graff, un problema de definiciones que se adaptan la parte de la realidad que nos interesa investigar. Y el color es una parte llena de matices.
Imagen | Eric Terrade
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NullPointerException
Entiendo que pueda ser una pregunta interesante y difícil de responder SI NO TIENES NI IDEA DE FÍSICA...
piratastur
Darle vueltas a si el transparente es un color me parece igual de estúpido que hacerlo sobre si el "rugoso" o el "pulido" son también colores.
El argumento de las capas de esmalte transparente alteran el color, se cae por si mismo en el momento que notamos que más capas más alteran, y por lo tanto reconocemos que precisamente el no ser totalmente transparentes es donde radica su influencia cromática, actuando como un cristal COLOREADO que filtra la luz, sutilmente, pero gracias a su COLOR, no a la ausencia total del mismo, ya que por definición, si su transparencia fuese del 100% (cosa que dudo mucho se pueda alcanzar), la influencia en el color sería nula (no así en la textura, brillo, etc...)
Por favor, no dejemos que el "romanticismo", o el querer inventar la pólvora en el siglo XXI, pasen por encima de la física.
tecnocratus
Me pasa igual con todos los artículos de @dronte: siempre presenta temas intrigantes y -a priori- super interesantes. Además les hace unas entradillas magníficas.... pero luego se deja el argumento a medio desarrollar.
Señores de Xataka: dejen a este chico que se explaye. Este tipo de entradas son las que aportan valor, y no el n-estimó review del móvil chino de turno!
Usuario desactivado
Ese cuadro está sobrevalorado
draghann
Bueno, nos hemos pasado años intentando averiguar a qué huelen las nubes. Por qué no dedicar otros tantos a esto...
patealaluna
No es un color, es el filtro Instagram de la época.