Si el viernes 13 estabas paseando por un casual por el desierto de Mojave, un amplio y árido paraje al sur de California, quizás hayas disfrutado del que probablemente sea uno de los espectáculos más impresionantes de la aviación moderna: un vuelo de prueba del gigantesco Scaled Composites Model 351 Stratoulanch, más conocido como Stratoulanch Roc. Y dada sus dimensiones, lo de gigantesco está lejos de ser una exageración: alcanza los 117 metros de envergadura, más que otros titanes de los cielos, como el Antonov An-225 Mriya o Hughes H-4 Hercules. Por aportar otra referencia, se aproxima a los 120 metros permitidos como longitud máxima para un campo de fútbol.
Aunque resulte todo un espectáculo y alarde de ingeniería, el vuelo de prueba de enero del Stratoulanch Roc no es una novedad. De hecho, con él van ya nueve. Lo que realmente lo hace único es que le ha permitido batir su propio récord operativo, superando las seis horas en el aire y desplazándose por primera vez más allá de Mojave. Junto a él, Roc llevaba además la aeronave de prueba TA-0. Más allá de marcar un nuevo récord en el aire, la operación que da un paso más en el camino de Stratolaunch hacia su gran meta: el lanzamiento de aeronaves hipersónicas.
Roc despegó del Puerto Aéreo y Espacial de Mojave el viernes 13 y —precisa Space.com— aterrizaba en la misma terminal pasadas seis horas de vuelo. Durante su operación llegó a alcanzar una altitud de alrededor de 22.500 pies, equivalente a 6.858 metros. “Los objetivos principales de la prueba incluyeron el vuelo fuera del área local de Mojave por primera vez y la evaluación del entorno de separación”, detalla la compañía en un comunicado en el que celebra el éxito de la maniobra.
Un titán de los cielos con un objetivo claro
Tanto Roc como el vehículo de prueba TA-0 que transportó aprovecharon el experimento para recabar “información crítica” sobre cuestiones como las cargas aerodinámicas que ahora ayudará a la empresa a avanzar en su fase de examen. Una vez revisada, Stratolaunch continuará hacia su objetivo: lograr su primer vuelo hipersónico de TA-1 a lo largo de la primera mitad de 2023.
Porque Roc no es un avión cualquiera. Por dimensiones. Y por enfoque.
En lo primero, su tarjeta de presentación es impresionante: 117 metros de envergadura y 73 de longitud, seis motores Pratt & Whitney PW4056 —los que usan los Boeing 747-400— y una carga útil de 226.800 kilos. Con respecto a su enfoque, el avión de Stratolaunch destaca por su potencial como plataforma de lanzamiento de vehículos hipersónicos. En mayo protagonizó de hecho su quinto vuelo experimental, en el que incorporó ya su “pilón”, la estructura que le permitirá cargar y luego lanzar vehículos. Entonces Roc voló durante algo menos de cinco horas, lejos de su nueva marca.
Los responsables de Roc lo plantean de hecho a modo de acelerador de tecnología hipersónica. Como ya os contamos en su día, tiene preparados cohetes autónomos Talon-A pensados para aprovechar su potencial de lanzamiento. El objetivo: trasladar cargas a una velocidad de Mach 6, más de 7.000 kilómetros por hora (km/h). Para probar su tecnología y posibilidades la firma lleva tiempo realizando una serie de pruebas, entre las que se enmarca el vuelo del pasado 13.
Roc completed its flight at 2:51 p.m. setting a new record for the longest flight to date at six hours and marking our first time flying outside of the Mojave range! pic.twitter.com/w3FaG9ABkV
— Stratolaunch (@Stratolaunch) January 13, 2023
Hace un par de meses, en noviembre, sus responsables ya probaron el “pilón” de Roc con el TA-0, una versión del Talon-A pensada precisamente para someter a examen todos los sistemas. Aunque la altitud que alcanzó entonces es muy similar a la que ha conseguido ahora, de alrededor de 7.000 metros, la duración del vuelo fue bastante menor: se prolongó poco más de cinco horas.
“Hemos generado confianza en que los componentes funcionarán exactamente para lo que fueron diseñados”, explicaba la compañía. De momento, eso sí, las operaciones se realizan como “transporte cautivo” con el vehículo de prueba TA-0, montado en el propio Roc.
“Una revisión de los datos de vuelo determinará los próximos pasos en el calendario de pruebas. Stratolaunch sigue avanzando hacia la prueba de separación y su primera vuelo hipersónico del TA-1 en el primer semestre de 2023”, señala ahora la compañía. El objetivo, aclara, es alcanzar un sistema de lanzamiento desde avión que permita eliminar barreras técnicas y logísticas.
Imagen de portada: Gauntlet Aerospace / Christian Turner